El caballo que conquistó el mar

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El caballo que conquistó el mar
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El caballo que conquistó el mar. Había una vez un caballo de mar que vivía en las profundidades del océano Atlántico. Era un ser mágico y único, pues su piel era de un color dorado y brillante que contrastaba con el azul oscuro del mar. Por muchos años, el caballo de mar se mantuvo alejado de los seres humanos y gozaba de su libertad en el mar.

Pero una noche, mientras nadaba cerca de la superficie del agua, el caballo de mar escuchó una melodía sumamente hermosa. Era una canción que venía de un barco cercano y el caballo de mar se acercó para escucharla. Al llegar, vio a un grupo de marineros que tocaban música y cantaban. El caballo de mar quedó completamente hipnotizado por la belleza de la canción y los sonidos de los instrumentos.

Fascinado por la melodía, el caballo de mar decidió acercarse aún más al barco. Pero al hacerlo, una gran ola lo empujó hacia la proa del barco y con el impacto, perdió el conocimiento. Los marineros lo encontraron y al ver al extraño caballo de mar, decidieron tomarlo consigo para exhibirlo en el puerto más cercano. Una vez allí, el caballo de mar fue metido en una pequeña jaula y todos los turistas quedaban encantados con su vista.

Sin embargo, este no era el lugar adecuado para el caballo de mar. El animal intentó escaparse de la jaula y liberarse, pero sus esfuerzos fueron en vano. Así que decidió encontrar una forma de volver al mar. Una noche, mientras los turistas dormían, el caballo de mar comenzó a planear su fuga. Escuchó a través de una ventana cómo los marineros planeaban regresarlo de vuelta al agua.

Entonces, el caballo de mar se aseguró de que en el camino de regreso al mar, pasara por un lugar en el que hubiera una fuerte corriente. Todos los marineros, junto con el caballo de mar, subieron al barco al día siguiente para empezar el viaje de regreso al océano.

Cuando llegaron al lugar acordado, el caballo de mar se dejó llevar por la corriente y al final, logró su objetivo. Al saltar de vuelta al mar, se liberó de sus captores. Era libre una vez más.

Pero a medida que nadaba en la superficie, vio varios barcos y, para su sorpresa, en cada barco encontró un instrumento musical diferente. Entonces, se le ocurrió una idea que le hizo pensar que quizá tenía un propósito en la vida.

El caballo de mar decidió viajar por todo el mundo para recolectar instrumentos que pudieran tocar una hermosa melodía. El primer lugar que visitó fue África, donde encontró un tambor que hacía ritmos grandiosos. Después viajó a Japón, donde encontró un instrumento llamado “koto” que producía un sonido relajante. Luego, en América, encontró un saxofón que proporcionaba una melodía increíblemente suave.

Así, el caballo de mar se lanzó a conquistar el mar una vez más, pero esta vez con una meta. A medida que viajaba, recolectaba instrumentos, los unía para tocar música y si la melodía era muy linda, la tocaba ante todos los seres del océano.

Con el tiempo, el caballo de mar se convirtió en una especie de estrella en el océano. Su nombre se conocía en todas las playas del mundo y cada vez que tocaba su música, encantaba a todo el que la escuchaba. Los animales del océano se reunían para escucharlo tocar, y su música era suficiente para alegrar a cualquiera que pasara un mal día.

El caballo de mar nunca había estado tan feliz y su nueva vida le dio un propósito. Sabía que había sido arrancado de su hogar y capturado por seres humanos, pero su corazón estaba agradecido por la oportunidad que le fue dada. Ahora tenía un público y un propósito. Y cuando tocaba su música, su alma se llenaba de felicidad.

A partir de entonces, el océano entero ya no hablaba solo del caballo de mar con su piel dorada y brillante, sino también de su música impresionante que conseguía atraer la felicidad de las criaturas del mar y de todo el que lo escuchaba.

Y así fue como el caballo de mar conquistó la grandeza del mar en su propia medida.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
El caballo que conquistó el mar
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