El árbol de Navidad mágico

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El árbol de Navidad mágico
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El árbol de Navidad mágico. Érase una vez en un pequeño pueblo, un árbol de Navidad mágico. Este árbol era especial porque cada año, durante la temporada navideña, se transformaba en un portal mágico que llevaba a los niños a un mundo lleno de dulces, juguetes y deseos cumplidos.

Nadie sabía cómo había llegado este árbol a ese pueblo, ni quién lo había plantado allí. Sin embargo, cada año, los niños venían corriendo para verlo y apreciar su belleza. Lo adornaban con brillantes luces, esferas de diferentes tamaños y colores, estrellas y cintas. Era verdaderamente impresionante.

Un día, la dueña de una tienda de juguetes cercana, una mujer amable y comprensiva llamada Amelia, se acercó al árbol de Navidad y se preguntó: «¿Será posible que este árbol sea tan mágico como dicen?».

Después de pensarlo por un momento, ella decidió probar su teoría. Por la noche, cuando el árbol estaba completamente solo, Amelia se acercó a él con una bolsa llena de juguetes y dulces.

Mientras colgaba los juguetes y adornos en las ramas, comenzó a hablar con el árbol: «¡Árbol mágico de Navidad!», dijo, «Si realmente eres mágico, haz algo increíble esta noche».

Amelia esperó el resto de la noche al lado del árbol, pero nada extraordinario sucedió, así que regresó a casa decepcionada.

Pero esa noche, mientras dormía, Amelia tuvo un sueño extraño. Se encontró en un mundo mágico, rodeada de juguetes y dulces que parecían flotar en el aire. Era como si la tienda de juguetes hubiera cobrado vida.

Pero su sueño no duró mucho. De repente, un trueno la sacó de su sueño mágico y la envió de vuelta a la realidad. Al abrir los ojos, se encontró frente al árbol de Navidad mágico.

En ese momento vio que su sueño había sido causado por el árbol. Estaba deslumbrada por la luz del árbol e impactada por su brillo. Se quedó inmóvil, observando cómo el árbol le regalaba un ramo de flores y unos dulces caseros exquisitos.

Amelia se dio cuenta de que todo lo que había experimentado en su sueño había sido una visión del futuro que podía ser posible si creía en la magia de la Navidad. Decidió llevar esta experiencia a los demás y compartir su historia sobre el árbol con todos los niños del pueblo.

Desde entonces, la gente venía de todas partes para ver el árbol de Navidad mágico, y su fama había llegado tan lejos que incluso los reyes y los gobernadores del país lo visitaban.

Mientras todos visitaban el árbol, el espíritu de la Navidad se extendía sobre el pueblo, y la gente se sentía más unida que nunca. Los niños saltaban y corrían alrededor del árbol, riendo, cantando y deseando todos los juguetes y dulces que veían.

Pero lo más sorprendente era lo que pasaba cuando las luces se apagaban. Los niños se reunían alrededor del árbol para compartir cuentos y sueños. Y por una noche, todos se olvidaban de sus problemas y preocupaciones y se entregaban a los deseos y anhelos de cada uno.

Un año, una niña llamada Ana llegó corriendo al árbol de Navidad mágico con una sonrisa en la cara. La pequeña pidió un deseo con todo su corazón: «Quiero mi juguete favorito, el que perdí en el parque!».

Días después, Ana recibió una caja misteriosa que contenía su juguete perdido. Dentro había una nota escrita de puño y letra: «Tu deseo se ha cumplido gracias al árbol de Navidad mágico».

La niña no podía creerlo y regresó al árbol de Navidad mágico para agradecer al árbol y dejarle un ramo de flores de colores.

La Navidad seguía siendo mágica en el pueblo gracias al árbol de Navidad mágico, que siempre tenía algo nuevo que ofrecer cada temporada. Los niños llegaban de todas partes del mundo para verlo y hacer sus deseos, y el árbol nunca los decepcionaba.

Érase una vez un árbol de Navidad mágico, que llenó de felicidad la vida no solo de los niños, sino también de los adultos. La Navidad nunca volvió a ser la misma y el pueblo le debía a este árbol mágico la alegría y felicidad que sentían cada año desde que apareció en el pueblo.

Debido al árbol, el pueblo se llenó de color, luces y magia, y siempre hubo un lugar mágico y hermoso que visitar cuando la Navidad llegaba. Y nunca se olvidaron de ella, porque sus recuerdos siempre continuaron viviendo en el árbol de Navidad mágico.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
El árbol de Navidad mágico
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