El León y la Sorpresa en la Granja. Érase una vez, en una granja alejada de la ciudad, vivían muchos animales felices. Allí había gallinas, vacas, ovejas, cerdos, caballos y muchos otros animales más. Todos ellos vivían en armonía y se llevaban muy bien.
Un día, llegó un nuevo huésped a la granja. Era un león muy grande y poderoso. Todos los animales se asustaron mucho al verlo, pues nunca habían visto un león tan de cerca.
El león se instaló en la granja y empezó a hacer amistad con los demás animales. Les mostró que, aunque fuera un animal salvaje, no era peligroso si se le trataba con respeto y cariño.
Los días pasaron y el león se hizo muy querido en la granja. Los animales lo consideraban como uno más y disfrutaban de su compañía. Un día, los animales decidieron organizar una gran fiesta para celebrar que el león se había convertido en su amigo.
El león estaba muy emocionado por la fiesta, pues sería la primera que celebraría con sus nuevos amigos. Los animales prepararon una gran mesa con comida deliciosa y bebidas refrescantes. También habían decorado todo el lugar con globos y banderines de colores.
Cuando llegó la hora de la fiesta, todos los animales se reunieron alrededor de la mesa para disfrutar de la deliciosa comida. El león estaba muy emocionado y agradecido con sus nuevos amigos. Pero lo que no sabía es que, sus amigos habían planeado una sorpresa para él.
De repente, todos los animales empezaron a cantar y a bailar alrededor del león. El león se quedó muy sorprendido al ver a sus amigos tan felices y animados. Entonces, los animales le hicieron un regalo muy especial al león.
Le entregaron una medalla que decía en letras doradas: «El león más amistoso del mundo». El león se emocionó mucho al recibir este reconocimiento por parte de sus amigos. Se sintió muy orgulloso de haberse ganado el cariño y la confianza de todos los animales de la granja.
Desde ese día, el león se convirtió en el guardián de la granja y de sus habitantes. Protegía a los animales de los peligros que pudieran acecharlos y les enseñaba a convivir en armonía y respeto.
La sorpresa en la fiesta había sido un gran éxito y había demostrado que, aunque las diferencias pueden parecer enormes, siempre hay un espacio para la amistad y el respeto mutuo.
Así es como el poderoso león se convirtió en un amigo fiel y protector de todos los animales de la granja. Y, aunque en un principio había causado miedo y desconcierto, demostró que las apariencias engañan y que el amor y la solidaridad son las mayores fortalezas de cualquier ser vivo.