La Leona Intrépida

Tiempo de lectura: 3 minutos

La Leona Intrépida
¿PREFIERES UN AUDIOCUENTO?

Si prefieres, puedes escuchar el cuento mientras haces otras tareas

La Leona Intrépida. Érase una vez en la selva africana, vivía una leona muy valiente y decidida, a la que todos llamaban «La Leona Intrépida». Era la más sagaz e inteligente entre los animales de la selva, y todos la respetaban por su coraje y astucia.

La Leona Intrépida tenía un gran corazón y siempre estaba dispuesta a ayudar a su comunidad, y siempre se aseguraba de que todos los animales estuvieran contentos y seguros en la selva.

Un día, mientras paseaba por la selva, vio a sus amigos, los monos, aterrorizados. La leona preguntó qué había pasado, y los monos le explicaron que un malvado cazador había entrado en la selva y había empezado a matar animales indiscriminadamente, sin importarle si eran grandes o pequeños.

La Leona Intrépida, enfurecida, decidió averiguar más sobre el cazador. Así que se adentró en la selva en busca del cazador, sorteando trampas y trucos para atrapar a los animales.

Finalmente, llegó al lugar donde se encontraba el cazador, y pudo observar que, en efecto, estaba cazando sin cuidado. Lo observó un rato y vio que el cazador ni siquiera disfrutaba de lo que estaba haciendo, simplemente lo hacía por el dinero.

La Leona Intrépida decidió que era necesario actuar y detener al cazador. Tenía que hacer algo para salvar a los animales de la selva y proteger su hogar.

Entonces, se le ocurrió una idea brillante. La Leona Intrépida fue a ver a las jirafas, las elefantas, los rinocerontes, las cebras y a todos los animales de la selva, y les pidió que se unieran a ella para detener al cazador.

Juntos, construyeron una gran trampa en forma de foso con ramas y hojas para que el cazador cayera en ella. Cuando el cazador cayó en la trampa, todos los animales convergieron en torno a él.

La Leona Intrépida le habló al cazador y le explicó que su acción estaba dañando a la selva, el hogar de todos los animales. Que todo ser vivo contribuye a un ecosistema, que no sólo hay grandes depredadores sino plantas, insectos y animales pequeños que también cumplen su función.

El cazador, sorprendido y asustado, se dio cuenta de que había estado causando dolor e incomodidad a los habitantes de la selva. Le pidió perdón a los animales, prometió que no volvería a cazar, y prometió también que enseñaría a otros cazadores el peligro y la crueldad de sus acciones.

La Leona Intrépida y todos los animales de la selva se alegraron de que el cazador hubiera entendido la importancia de proteger a la naturaleza. Se lo agradecieron y le perdonaron.

Desde ese día, el cazador se unió a la lucha por la protección de la selva, y realizó campañas en todo el mundo para alertar a las personas sobre el cuidado del medio ambiente.

La Leona Intrépida se sintió muy orgullosa de su noble lucha y de haber salvado a la selva. Pero, sobretodo, se sintió feliz de haber hecho nuevos amigos y haber ayudado a aquel que alguna vez les había causado daño.

Y así, la selva continuó creciendo y prosperando, y la Leona Intrépida y sus amigos animales vivieron felices siempre, protegiéndola del mal y luchando por un futuro mejor.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
La Leona Intrépida
¿Te ha gustado «La Leona Intrépida»?
¡Compártelo con tus amigos!
Facebook
Twitter
Pinterest
WhatsApp
Email
Imprimir